La empresa Frugalpac lanza al mercado Frugal, su nueva botella de cartón reciclado para vinos. Además de contar con un contorno personalizable, su huella de carbono es considerablemente menor en comparación con las botellas de cristal tradicionales.
Su reducida huella de carbono -un 85% menor que la de una botella de cristal y un tercio menos que una de plástico- y bajo impacto hídrico son las banderas bajo las que Frugal promete ser una revolución en el campo del embotellado. Por otro lado, la botella cuenta con tan solo 15 gramos de plástico en su composición, una cantidad 4 veces menor que la presente en las botellas de plástico y tetrabricks, siendo éste también reciclado.
Otra de las cualidades que caracterizan a esta peculiar botella es su contorno, completamente personalizable. Mientras que las botellas de vidrio tradicionales están limitadas al espacio del etiquetado, Frugal, al estar compuesta mayormente de cartón, el 'etiquetado' puede abarcar la totalidad del envase. Además, la botella puede producirse en las propias instalaciones de embotellado de las bodegas, siendo su precio similar al de una de cristal con su correspondiente etiqueta. Pese a todas las ventajas ofrecidas por Frugal, parece no haber tenido especial éxito entre la industria del vino, habiendo sido la italiana Cantina Goccia la única bodega en incorporar este envase para su vino 3Q. "La botella Frugal está siendo considerada por varias cadenas de supermercados y otras empresas del Reino Unido que están interesadas en promover el envase sostenible, por lo que se prevé que estará disponible en otros puntos de venta en todo el Reino Unido, Holanda y Dinamarca en las próximas semanas." Según explican en su página web.
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